jueves, 6 de diciembre de 2012

El miedo a la crisis permanente; ( el miedo como excusa para oprimir al pueblo)


Con la historia de la crisis, el obrero esta pillado de por vida;  Es la excusa perfecta, para poder tenerlo amarrado a los intereses del capital.
El obrero por miedo a perder lo poco que tiene básicamente el sustento mínimo, que apenas le permite comer, traga con todo y así mismo da las gracias a su salvador que lo acoge en su seno
Antes se recurrió a otros miedos,  la guerra fría, (años 50) crisis del petróleo (años 80) desindustrializacion (2000);  y alguna mas que se les ocurra, en el momento que el pueblo consiga cierto margen de beneficios sociales, que les pueda restar poder sobre las masas ( lo que pone en peligro la minoría  que pudiera pasar
a no ser lo tanto y como consecuencia la cultura pase al pueblo, poniendo contra la pared los puestos de trabajo mejor renumerados, que pudieran pasar a manos de los mas inteligentes, en lugar de estar en sus manos por muy incompetentes que sean).
Esto les permite que en el momento que sus negocios no sean enormemente rentables, robar con total impunidad, ya que si la ( justicia ) por algún motivo los condena siempre serán indultados, ya que los políticos están en su nomina y tienen asegurada la publicidad que estos le proporcionan. Y si estos miedos
no son lo suficiente, siempre se puede criminalizar a un grupo de los que componen el país; ya lo hizo el nazismo con los judíos,  EE. UU con los hispanos e incluso Japón con los Chinos ( años 40) 
Por si esto no fuera suficiente siempre se puede recurrir a la religión, 

Nuestra crisis es financiera. Se creó financieramente y financieramente se desarrolla. Pero hay muy pocos responsables procesados aunque decenas de miles de familias estén perdiendo sus casas y trabajos y, una empresa tras otra, quiebre el sistema que produce todo lo que necesitamos.

La crisis financiera no se explica bien. Casi nadie la entiende. Hay una prima de riesgo que debemos temer, un déficit que no nos debemos permitir, unos impuestos que no deben pagar grandes empresas ni en general los ricos y sobre todo, y como raíz de todo, unos bancos cuyas cuentas no cuadran. Pues la crisis financiera es principalmente eso: un tremendo problema de contabilidad; consiste en que no hay correspondencia entre el dinero contabilizado y la riqueza real que debe respaldarlo. El dinero que con tanta avaricia "hicieron" los financieros se mezcló con el dinero real que traducía riqueza honestamente generada y ahora, el valor de los dos, está amenazado. Todas las reformas que “hacemos” van dirigidas a mantener ese dudoso valor derivando una proporción cada vez mayor de la riqueza social al sostenimiento de su absurda contabilidad.

Se justifica en que se trata de proteger la inversión del honesto ahorrador y del pensionista que no debieran tener que pagar el desaguisado de los bancos, claro, pero… ninguno de los que realizaron el saqueo está en prisión, ni sus yates mansiones embargados, ni reclamados sus acciones valores opciones y depósitos, para responder por su mala gestión. De hecho siguen reteniendo como si fuese real el beneficio de su especulación.

No había delito, nos sugieren. Así que voy a recurrir a una analogía sencilla.

Si uno compra una casa por diez, y ni la reforma ni la habita, ni hace nada con ella salvo venderla ahora por veinte… los otros diez, ¿de dónde han salido? No me refiero al mercado, sino a la riqueza real ¿en qué momento y de qué manera se ha producido la riqueza por valor de diez que gana el especulador?

Efectivamente no se ha creado un incremento de riqueza proporcional al incremento de valor “contable” de los inmuebles, y esto constituye la “burbuja inmobiliaria”. Durante algunos años, muchas personas en muchos países del ámbito occidental ganaron más con el incremento de valor de sus casas que con su propio trabajo profesional, precisamente en un periodo en el que los sueldos no eran bajos. Estas personas se sentían naturalmente felices y, faltos de ciencia económica, ignoraban el tremendo desajuste. Por eso ahora nos dicen que estas personas son los culpables. Que esa burbuja nos ha hundido con sus millones de inmuebles sobre-tasados y la necesidad de cuadrar las cuentas aportando el dinero faltante… de la sociedad, a los bancos que aportaron la “financiación” y a los que “se debe” el irreal incremento de valor simplemente porque ya lo contabilizaron y, tenemos que creer que inocentemente, se lo repartieron.

No se produce de forma inversa, no hay retorno: si en vez de un incremento de valor se produce una pérdida, los bancos no aportan nada, ni siquiera responsabilidad. Y los sacrificios exigidos a la gente no son para el beneficio de la propia gente; no se trata de mejorar sus propias cuentas, no se trata de mantener el valor de sus propias casas, ni siquiera se trata de que puedan seguir pagando su propia comida. De lo que se trata es, exclusivamente, que la élite financiera, los llamados “inversores” por los medios de comunicación, ellos y solo ellos, no pierdan su dinero, el que prestaron forzando “inadvertidamente” el absurdo incremento de “valor”. Incremento de valor contable, que no de riqueza, y que ahora pretenden que de todos modos se les debe. Pero la dación en pago, el devolverles el real objeto financiado no les satisface: ellos exigen también los “otros diez” que su sistema especulativo inventó y contabilizó; y reclaman ser pagados con riqueza real que no se ha generado y que, en su juego viciado, deberemos producir nosotros durante años.

Pero lo peor es que no es ni verdad… La burbuja financiera ha sido un efecto, ella misma, del verdadero problema, y no la causa de nuestra implosión social. No es más que la parte del iceberg visible porque es la única que nos quieren mostrar…

No solo los inmuebles se incrementaban contablemente de valor. Al fin y al cabo una casa sí es una casa y una hipoteca tiene esa realidad detrás. Pero la mayoría de los “beneficios” contables que durante la era Bush se repartieron los banksters tienen por objeto entelequias que carecen de ninguna realidad, puro y simple papel nada más…

Los ingenieros financieros inventaron “productos” muy sofisticados. Con ecuaciones literalmente indescifrables, destacados matemáticos atribuyeron a esos pedazos de papel (que llamaron de diferentes formas como valor, opción, acción o miles de otros “derivados”) grandes “rentabilidades” decididas a conveniencia de su bankster patrón. Si un inversor compraba uno de estos papeles por diez, al cabo de un tiempo su contabilidad anotaría veinte, o cien. Bueno, hay muchos más papeles de esos que casas… y ahora resulta que las ecuaciones… no eran más que sudokus, puro juego y no verdadera matemática; y la riqueza correspondiente nunca fue creada.

Las transacciones financieras son como el aceite de un motor, necesario para el funcionamiento de la máquina, pero no son su combustible, su energía, ni causan su movimiento. La especulación en una proporción limitada es, no solo inevitable, sino probablemente necesaria. Pero su hipertrofia, por el contrario, deriva en cáncer.

La efectividad del dinero contable depende de su capacidad para obtener rentabilidad. Nuestro sistema económico está basado en que el dinero, por el mero hecho de existir, sea recompensado con esa rentabilidad, o interés. Los cientos de miles de millones contabilizados así gracias a la fraudulenta acción del señor “mercado” reclaman ahora rentabilidad e interés como si fuesen riqueza real, como si lógicamente se les debiese ese pago por haber mejorado la cantidad y calidad de la producción social. Solo que no crearon nada más que apuntes electrónicos en un computador que trasvasaron luego a otros computadores en paraísos fiscales. Y la burbuja “inmobiliaria” sirve muy bien para despistar de los innumerables y artificiales “productos” financieros especulativos con que inflaron su contabilidad, haciéndose inmensamente ricos de esos dólares electrónicos tan falsos como euros de madera, pero que no quieren “perder” pese a todo.

El desajuste está en la alta finanza y no parece una buena solución corregirlo desviando la riqueza realmente creada por el trabajo, la creatividad y la organización, a pagar la rentabilidad inmerecida de un dinero que, básicamente, se “inventó”. El resultado de esta opción está siendo la destrucción del sistema productivo al negarle su propia remuneración y, aunque la prioridad se haya establecido en que los inversores (los grandes inversores) no pierdan “ese” dinero contable, solo mientras ese dinero contable siga rentando satisfactoriamente, se sostendrá el actual sistema financiero.

¿Durante cuánto tiempo más lo apuntalará lo que se está haciendo?
Habrá que ir pensando en lo del trueque por si acaso...

Don Quijote de Cantabria ó el Judio converso de Botin





La historia secreta de los Botín

En el  post: Hipotecas basura en el reino de la usura salía a relucir Donemilione también conocido por Emilio Botín que resultaba ser el capo de unos delincuentes que arruinan a todo cliente que cae en sus manos endosándoles hipotecas basura imposibles de pagar. Unión de Créditos Inmobiliarios, entidad participada por el Santander, se disfraza de entidad financiera para continuar, año tras año, haciendo de las suyas abusando de miles de familias a las que arruina aprovechando la indefensión en la que se encuentra el deudor al aplicarle, con todas de la ley y a raja tabla, la Ley Hipotecaria, un procedimiento situado en la Edad Media que no permite al cautivo abrir la boca ni decir palabra. Quizás a muchos de los habituales del blog les puede parecer que el apelativo de Donemilione es exagerado, no obstante, dejando al margen un buen número de visitas a los juzgados, tan sólo en este año Emilio Botín, presidente del Banco Santander se ha visto involucrado en dos procesos judiciales a) el que se le pretendía juzgar por sobornar al juez Baltasar Garzón con prebendas variadas en su año sabático en New York. Ver en los archivos del mes de febrero El archivo de la causa contra Garzón esconde el banco paralelo del Santander y b) un asunto fiscal de tener escondido en Suiza 2.000 millones de euros y que Hacienda, tan diligente con el currito de turno al que golpea con puño de hierro y no de deja pasar ni una, en contraste con el guante de seda aplicado a la poderosa familia Botín que antes de instruir un proceso de inspección se le comunica al defraudador interpretando que ha tenido un descuido en su declaración de renta y que sino le importa por una miseria de tributación están dispuestos a olvidarse del asunto. Para, definitivamente, olvidarse del asunto tiene que montarse el teatrillo de pasar por la lavadora de asuntos peliagudos que proporciona la justicia. Ver en los archivos del mes de mayo Se ha iniciado el punto sin retorno …….
Estamos perdidos, en un mundo al revés donde el populacho tan sólo es el pagano de una descomunal estructura de Estado y una camarilla de espabilados mueve los hilos del teatrillo de la democracia en la que se forran mientras las penalidades de la plebe crecen a un ritmo espectacular. Insisto en lo del mundo al revés, Falciani el empleado del banco HSBC que destapó las cuentas secretas de un montón de millonetis está en la cárcel mientras los Botín siguen donde estaban y ni tan siquiera se les ha llamado a declarar a un juzgado. El descuido por el olvido del fortunón de la familia Botín en Suiza se salda con la módica aportación de un triste 1%. Me explico para aquellos que les parezca increíble o aquellos que se han visto sorprendidos por Hacienda cuando, cogido por los pelos, les ha enviado una “complementaria” a su declaración renta. Hablan del 10% de la cantidad trincada en el paraíso fiscal, pero en realidad se refieren al 10% del rendimiento (los intereses que genera el capital) que supongamos es del 3% anual, por los últimos 4 años (los anteriores están prescritos) da un total del 12% al que se le aplica el 10%, ¡tachan, tachan! aquí tenemos el 1,2% sin multa alguna por tener desde hace años 2.000 millones de euros fuera del alcance de Hacienda. La escusa, más que el argumento, de los Botín para disponer de esta fortuna en Suiza es la peregrina afirmación de la fortuna perteneció al padre de la saga que la tenía escondida para que no se la incautaran los “rojos”. Con esta increíble afirmación que ha servido de Jordán purificador ¿Los botín no se han metido en otro lío? Emilio Botín padre, murió en 1993 dejando una fortuna de las incalculables por la que los herederos tuvieron que pagar por impuestos de la herencia 10.500 millones de las antiguas pesetas (63,1 millones de euros) por lo que se deduce del argumento de los Botín de que el dinero era del padre, los 2.000 millones de euros están pendientes del pago de impuestos de transmisiones. Esto no deja de ser una pequeñez que se compensará con miles de persecuciones a los que menos tienen para repizcarles unos euros. El trato exquisito a los Botín tiene mucho que ver con la financiación de los partidos políticos y del indudable apoyo al partido que consiga formar gobierno. Las prebendas y los patrocinios vienen de atrás por lo que creo conveniente poder echar un vistazo a la historia secreta de los Botín.
De Botín a Botín: de casta le viene al galgo
Emilio Botín, el actual presidente del Banco Santander, ha heredado de su padre el estilo agresivo y desenvuelto en el ejercicio de la actividad bancaria, algo que ha permitido el imparable ascenso de su banco durante los últimos años. Lo que ya se había cimentado, cuando menos en experiencia, con las espectaculares operaciones de su antecesor, el mítico don Emilio, que consiguió alcanzar unas metas consideradas como inabordables. Su abuelo Emilio Botín López, decía que en los negocios “hay que jugar siempre con ventaja, con un as en la manga”. La norma de su nieto es aún más terminante: Hay que devorar antes de que te devoren”. Entre ambos se sitúa el verdadero don Emilio, prácticamente el primero de la saga solía decir: “Quien da primero da dos veces”. Cabe reconocer que los Botín son gentes de pocos pero contundentes ideas expresadas a través de frases no precisamente originales. Pero con tan primario bagaje ideológico les ha funcionado para bastir el más sólido imperio -en lo económico- de España. Hay que reconocer de esta gente a la hora de solucionar los asuntos que les concierne es el sentido pragmático el que domina: Emilio Botín padre, contaba que en Santander había un inspector de Hacienda que estaba metiendo en cintura al banco y a sus máximos rectores, y se jactaba de haber solucionado el problema nombrando alto directivo de la Fundación Marcelino Botín al funcionario. Este episodio cuadra con las citas de estos eminentes próceres que se transmite de generación en generación en virtud a la efectividad que se obtiene de ellas.
Emilio Botín Sanz de Sauturola falleció en 1993 y fue presidente del Banco Santander durante 56 años: entre 1930 y 1986
El contenido mítico de la saga Botín arranca, sin lugar a dudas, en la personalidad eminente del padre, Emilio Botín Sanz de Sautuola -el don Emilio por antonomasia- que murió a los 90 años, habiendo sido presidente del Santander durante 36, entre 1950 y 1986. Y aunque los hagiógrafos pretenden forjar una leyenda en torno a los antecedentes bancarios del actual presidente del Santander, por lo que hablan de que es hijo, nieto y bisnieto de banqueros. Pero esto no se corresponde con la realidad porque la historia bancaria de la familia empieza en el padre del actual Emilio. El abuelo y el bisabuelo no sabían distinguir una letra a la vista de otra a días o meses vista, y hay quienes aseguran que les resultaba imposible de todo punto liquidar una cuenta corriente. Y lo curioso del caso es que no parecía que el destino hubiera llamado a don Emilio, el padre, por los caminos de las finanzas. Antes, fue un joven santanderino sin oficio ni beneficio, el cual, hasta que entró en el banco llevado de la mano por su tío Marcelino, tenía como principal ocupación desplumar a sus paisanos jugando al póquer. Al menos, así lo relató el que fue presidente del diario Informaciones, Víctor de la Serna, hijo del gran escritor y periodista e intimo de los Botín. El personaje tenía alma de jugador cuando el banco se hallaba en una situación muy difícil, y un buen día el presidente, don Marcelino, sorprendió a los pocos consejeros que quedaban en la casa diciéndoles que, para arreglar las cosas, había contratado a su sobrino Emilio como director. Obvio es decir que los demás administradores dimitieron en el acto, aunque la favorable predicción del tío se cumplió en términos insospechados: desde ese mismo día Emilio Botín Sanz de Sautuola y López se dio de baja en todos los casinos y empezó a jugar a lo grande en otras mesas de juego mucho más provechosas: los consejos de administración de las múltiples sociedades que se le ponían a tiro. Parece que el cambio de fichas lo llevo don Emilio Botín hasta las últimas consecuencias, puesto que nunca más quiso saber nada de las otras mesas de juego, las recreativas; el mismo Víctor de la Serna hijo contaba que acompañó con otros amigos a Emilio Botín a pasar unos días en Montecarlo, y todos entraron a probar fortuna en el casino, menos don Emilio que se abstuvo de tentar a la suerte.
En sus 36 años de mandato al frente del Santander, don Emilio dirigió con mano férrea el banco hasta conseguir la identificación, prácticamente absoluta, entre su familia y la entidad. Quienes trabajaron con el cántabro, o le trataron en la intimidad, dicen que, aparte de sus grandes dotes de negociador, era un conversador excelente. Pero también sobresalía en él otro rasgo de indudable mérito: cualquiera que fuese recibido en su casa, por modesta que fuese la condición del huésped, don Emilio primero le consagraba su solicita atención, de tal suerte que muy rara vez accedía a interrumpir la entrevista si le anunciaban cualquier llamada telefónica urgente. Se cuenta que, en una ocasión, un amigo se lo encontró saliendo del edificio de la calle de Alcalá, en la que el Santander llegó a tener su oficina principal en Madrid, acompañado de un modesto director de sucursal. El presidente le dijo al verle: “Te presento a uno de los mejores directores de nuestro banco; esta haciendo una labor excepcional en su ciudad”. Luego, cuando ya se fue el subordinado henchido de orgullo, añadió: “Comprenderás que estas cosas hay que hacerlas porque dan un magnifico resultados ahora este hombre se va a comer a todos sus competidores juntos”. En las comidas  que ofrecía en su casa, don Emilio obsequiaba invariable a sus invitados con unos riquísimos pescados llenos de espinas, y siempre se ofrecía a servirlo él mismo practicando la operación con el cuidado de un experto cirujano. A propósito de comidas, Cesar Martínez Beascoechea, entonces secretario general de la entidad, todavía no alcanza a comprender cómo logró convencer a Pablo Garnica para que Banesto no se merendara al Santander. Todo lo contrario con lo que sucedió años después cuando el Santander de los Botín se comió al viejo banco madrileño de un bocado. Y es que no siempre el pez gordo se come al chico.
La compra del Banco Mercantil fue una de las jugadas maestras de Botín Sanz de Sautuola. Un pulso que sirvió para demostrar que, en algunas ocasiones, es el pez pequeño el que se pega la gran comilona. La operación fue tan comentada en todos los círculos financieros, que más de un banquero, con envidiables dotes adivinatorias, llego a pronosticar el hundimiento definitivo de don Emilio. El patriarca de los Botín pasaba por ser un hombre emotivo, hasta el punto que, se dice, que en los entierros se le saltaban las lágrimas con facilidad suma. Pero su faceta sentimental quedaba aparcada del todo cuando se trataba de defender los intereses del banco no dejaba pasar por alto el menor fallo, ni le temblaba el pulso a la hora de cesar a cualquier directivo, por muchos servicios que hubiese prestado a la entidad. Don Emilio ha pasado tanto a la historia como a la leyenda de la banca. Su misma figura ha quedado como un icono referencial: solía aparecer en verano con un impecable traje blanco de lino y bastón con delicada empuñadura de plata, y cubierto en invierno con un abrigo de visón hasta los pies y un elegante sombrero. En una ocasión dijo:”Casi nadie gasta de acuerdo con lo que tiene. Unos viven por encima de sus posibilidades y otros por debajo”. Convengamos, una vez más, en que tales reflexiones no merecen la inmortalidad intelectual, pero lo cierto es que la familia Botín ha estado siempre entre los segundos, sobre todo porque lo que gastan sus miembros lo paga el Santander. Cuenta el director de una editorial de Burgos, dedicada a la publicación de libros históricos, que le fue a visitar el director de la sucursal del Santander para pedirle una obra que interesaba a alguien de la familiar Botín, pero al mismo tiempo solicitó “una importante rebaja”, porque así se lo habían ordenado. El precio de la obrita en cuestión era de 1.500 pesetas, y el director de la editorial optó por regalarlo para que no padeciese de manera grave la solvencia económica de la familia; de la que por supuesto no recibió muestra alguna de agradecimiento.
Un Greco en el dormitorio
Además de su interés por la historia, don Emilio Botín tenía una decidida afición por la buena pintura, siempre, claro esta, que pudiera comprarla a precio de saldo. Con agudeza indiscutible, asoció muy pronto sus gustos pictóricos a la obra de Solana, hasta el punto de que logó adquirir la mejor colección del genial artista. Con buen ojo se encaprichó también de un cuadro del Greco que custodiaban las monjas del Hospital de la Caridad de Illescas. Se trataba de una extraordinaria obra: La  Adoración de los Pastores, que el genial artista de las caras largas la realizó para presidir en su propia tumba en Santo Domingo el Antiguo, en Toledo. Los designios del Greco no se cumplieron y el cuadro dio algunas vueltas. Hasta la muerte del banquero cántabro presidió en su dormitorio de El Promontorio (la residencia de los Botín en Santander), después pasó al salón principal del banco (su antigua sede) en el paseo de la Castellana, y ahora, en la actualidad, puede contemplarse en el Museo del Prado. La historia de cómo llegó al museo nacional es supuesta pero se dice, con cierto criterio, que los Botín entregaron la tela en compensación para saldar una deuda fiscal que supuso un buen trueque para la saga de banqueros. Pero vayamos a como se consiguió la preciada obra. Obtener la ansiada tela no fue tarea fácil. Hace ya unos cuantos años, el santanderino mandó a su amigo, Víctor de la Serna, para que desplegara sus dotes diplomáticas con la madre superiora del Hospital y consiguiera, siempre por supuesto a un a módico precio, el apetecido óleo. El escritor iba y venía de Illescas un día si el otro también y un mes y otro mes, pero el Greco no caía. Hasta que una mañana don Emilio tomó cartas en el asunto y mandó traer una cartera de mano en la que metió fajos de mil pesetas hasta llegar a la exorbitante cifra de un millón de entonces. Acompañado de su amigo de la Serna, subieron en su Rolls-Royce y el banquero estiro la pierna derecha, como solía hacer por su flebitis, poniendo el pie a la altura de la cara del chófer perfectamente uniformado. Y así llegaron al ilustre rincón toledano, hablaron con las monjas, y don Emilio, de improviso, abrió ante ellas la cartera en la que refulgía el color verde. La madre superiora, al ver el deslumbrante espectáculo numismático, no dudo en permutar de inmediato la cartera con su irresistible contenido, no dudo en poner el Greco encima de la mesa. Una vez más, el banquero hizo un magnifico negocio. Cabe recordar que en las últimas subastas las obras del maestro de Creta se habían pagado por más de mil millones de pesetas, mil veces más de lo que había pagado a las monjitas.
Devorando los peces pequeños
Emilio Botín II junto a Emilio Botín I
Desde sus orígenes al mando de1 Santander, que se inician en 1941, hasta su retiro en diciembre de 1989, pasaron muchas cosas para don Emilio. Su primer gran éxito -como ya se ha dicho- lo culmino al absorber al gran banco rival en la región cantabra, el Mercantil de Santander, estrategia de expansión llevada a cabo desde su puesto de director general. Con esta operación el “bancuco” (como muchos llamaban al Santander) dobló su tamaño. Después vendría la apertura de sucursales, la compra de otros bancos y la aventura de las Americas, con la implantación de una cuidada red de oficinas en aquel continente. A finales de 1980 obtuvo el control de la Banca Jover y del Banco Comercial Español. Del reparto del pastel de Rumasa, al Santander le correspondieron el Banco de Murcia y el Comercial de Cataluña. Hay que reconocer que Botín senior unía a su ambición sin limites un innegable tesón bastará con decir que, durante sus primeros años de mandato en el banco, dormía doscientas noches al año en el tren que une Madrid con Santander. En invierno llegaba a la estación santanderina con su ropaje más so1emne, en e1 que, como ya se ha dicho, destacaba sobre todo e1 abrigo de pieles que le llegaba hasta los pies. E1 mozo del coche-cama le sudaba con reverencia, y e1 banquero le correspondía sacando del bolsillo derecho de la chaqueta un fajo de billetes de cien pesetas, del que cuidadosamente cogía uno y se lo  daba al empleado; así fue durante tanto tiempo que cuando los billetes de cien pesetas dejaron de circular seguía dándole uno al mozo que lo recibía con los mismos signos de gratitud que cuando tenían curso legal. Esto es tan sólo una anécdota que nos introduce en el próximo post como suma y sigue.
tes
BICI 001
DEVORA2 001Emilio Botín Sanz de Sautuola tenía el convencimiento profundo de que los Botín habían nacido para la banca, sobre todo él, dotado de un olfato lobuno para los buenos negocios y una pasión incontenible por las finanzas, especialmente por las ajenas. Veamos como se montaron en el negocio bancario alejados del rollo patatero de múltiples cuentacuentos a tanto la línea. La creación del Santander como entidad bancaria comienza en 1857, pero sin ningún apellido Botín entre sus fundadores. El banco nació con la con la idea de dar cobertura a las necesidades comerciales que en aquella época tenia la Montana; el trigo de Castilla había que embarcarlo en Santander rumbo a las Américas, a cambio de productos exóticos y ultramarinos. Esta fue la razón que llevó a los comerciantes de la región a unirse para fundar el pequeño banco que ha dado origen al gigante de hoy. El 20 de agosto de 1857 la entidad abrió por vez primera sus puertas al público en un local que pertenecía al Marques de Pombo, y que, posteriormente, acogería al Club de Regatas de la capital cantabra. Habrían de pasar muchos años, y algún que otro incendio, para que en 1890 el banco se establezca en el número 2 del Muelle, el actual paseo de Pereda, con un capital social de cinco millones de reales de vellón y trece empleados en plantilla. Apostillemos tan sólo un par de datos: el gigante bancario cuenta ahora con 10.852 oficinas, la mayor red minorista del mundo y con 190.604 empleados en el grupo repartidos por medio mundo, España 33.345, Europa 64.101, Reino Unido 25.574, Latinoamérica 89.860, Estados Unidos 8.781 y en actividades corporativas 2.288
Los comienzos del banco no fueron muy boyantes, como reflejan las crónicas de aquellos años. Muy pronto perdió el privilegio de emitir papel moneda, reservado con carácter exclusivo al Banco de España. Don Emilio Botín López, el iniciador de la saga Botín, un hombre con pocas dotes para las finanzas y que a buen seguro no sabia distinguir una letra de cambio de un pagaré, no fue presidente hasta 1909, debido al carácter rotatorio del cargo, por lo que su trayectoria bancaria resultó tan fugaz como anodina. De ahí que la teoría del pedigrí obedezca al denodado esfuerzo hagiográfico de cronistas interesados. El primer apellido ilustre de la familia lo aporta el bisabuelo del actual presidente del Santander, Marcelino Sanz de Sautuola, pero su gloria no se debe tanto a sus habilidades financieras sino al casual hecho de haber sido descubridor, con su hija María de las cuevas de Altamira, en 1879. Los Sanz de Sautuola heredaron la fastuosa finca de Puente San Miguel, en donde, al casarse doña María con Emilio Botín López, el matrimonio fijó su residencia. En esta casa, el profesor Cartailhac, de la Universidad de Toulouse, hubo de acudir a disculparse en 1905, por haber cuestionado la autenticidad de las pinturas rupestres, ante la abuela del actual Emilio Botín, una dama con fama de espíritu caritativo que, según se cuenta, recibía diariamente en la finca a numerosos lugareños para darles de comer. Quienes la conocieron alaban sin disimulo sus dotes de administración, y su capacidad ahorradora, hasta el punto de que cuando el hijo del carnicero le llevaba la carne, la pesaba ella misma para comprobar que la ración se ajustaba escrupulosamente a lo solicitado, y si faltaban unos gramos devolvía el pedido.
MADRE 001La finca de Puente San Miguel ha sido lugar de celebración de bodas y bautizos de toda la Familia, oficiadas bajo las especies arbóreas exóticas y preciadas, cuyo inventariado incluye desde una meta secuoya (única en España que doña Ana García de los Ríos -la madre de Emilio y Jaime Botín- se trajo de Londres en una sombrerera, hasta cedros dorados, arces airosos, araucarias frondosas y tejos de Hokkaido. El verdadero impulsor de aquel hermoso rincón fue Emilio Botín padre, don Emilio, sin duda mucho más preocupado por sus plantas que por los problemas industriales de la región, la endémica asignatura pendiente de los Botín. Allí, en aquel paradisiaco rincón, solía recibir también a sus colegas bancarios, a los que sometía a su particular tercer grado en sesiones reposadas, en las que casi siempre conseguía sus expansivos propósitos. De aquellas conversaciones surgieron anécdotas sin desperdicio. En una ocasión se hallaba en el jardín hablando con Ignacio Villalonga, dueño y presidente del Banco Central, cuando Pablo Tarrero, vicepresidente ejecutivo del Santander, interrumpió la velada para decirles que otro grupo de banqueros que habían sido citados ya estaban esperando en la casa. Tarrero se acercó a los otros dos y les dijo: “Bueno, qué, ¿estáis subiendo la bolsa?”, a lo que a Villalonga replicó: “No, Pablo, hoy nos toca bajarla”. Esas eran las maneras que gastaban los banqueros en la época franquista para enriquecerse de la forma más indecorosa, sin que nadie del régimen se atreviera a ponerles en su sitio aunque, claro esta que, de aquellos polvos vienen estos lodos.
Sangre de banquero en las venas
images[1]Quizás el secreto del éxito de los Botín estaba justamente en los orígenes ancestrales de la familia. El secreto de los Botín, guardado bajo siete llaves, reside en sus ancestros judíos, vinculados a los chuetas mallorquines convertidos al cristianismo, y que desde la isla fueron emigrando a distintas partes de la península. Es verdad que sus rasgos fisonómicos, tez oscura y rasgos orientales, en nada coinciden con la tipología habitual de las gentes de Cantabria. No hay raíces del apellido Botín en tierras cantabras. Los tratados de genealogía están en blanco cuando alguien quiere saber algo sobre el apellido Botín. Así, en los más prestigiosos tratados de heráldica y genealogía, no aparece una sola línea acerca del apellido, a pesar de los esfuerzos de don Emilio, y sus ínfulas aristocráticas, por alargar su linaje mediante una ristra interminable de ancestros. Su pasión innata por la banca hace de don Emilio el primer banquero español que vislumbró el potencial del negocio al otro lado del Atlántico. Empezó por Puerto Rico, después fue Argentina, mas tarde Venezuela. Al principio sólo se trataba de simples oficinas de representación, aunque no tardó en abrir sucursales propias. Después vino la compra de otros bancos y la red se extendió por todo el continente americano, en el que cuentan y no acaban de las mil marrullerías cometidas por los responsables de la entidad cántabra en aquel continente. A la par, la expansión del Santander en España, a pesar del statu quo bancario pregonado por el patriarca de los Botín, encontró las condiciones idóneas en la década de los sesenta, a lo que no fue ajeno el boom de la construcción.
Así, hasta levantar un imperio que, según se jactaba el propio don Emilio, se había acumulado “peseta a peseta”. Su obsesión por la acumulación de activos llegó a convertirse en leyenda. Esas pesetas que ganaba el banco (el banco y la familia), otros las perdían, y don Emilio, cuando tenía que defenderse de acciones discutibles, no dudaba en decir que todo lo hacia “en defensa de sus accionistas”. Este escudo protector le servia para desenvainar la espada, siempre esgrimida con determinación, bajo el lema“atacar antes de ser atacado”, una sabia dicotomía entre la defensa y el ataque como el producto más acabado de otra variante en la que llego a ser un virtuoso: “Devora antes de que te devoren”, implacable doctrina que corresponde a la herencia genética de la familia. La verdad es que se lanzaba al ataque con decisión pero no sin cautelas previas, conociendo de antemano el potencial del adversario y, si sé me apura, hasta el desenlace de la contienda. Juan Abelló, íntimo amigo de los Botín, los describe diciendo que, en trance de buscar solución a cualquier controversia susceptible de tres posibilidades para acabar con el conflicto, ellos siempre eligen la que más daño puede hacer a su contrincante. Con esta óptica de los negocios, don Emilio Botín tuvo que enfrentarse a innumerables batallas. Sus adversarios, más bien sus enemigos -y este carácter concurría para él en cualquiera que intentara hacer sombra a su reinado- eran borrados del mapa de un plumazo. Su concepto del capitalismo erigido en dogma moral y fundamento de una verdadera cruzada financiera, se basaba en la máxima eficacia en los resultados y la obediencia ciega prestada por sus colaboradores, desde el consejo de administración al último botones.
Peligro de caída
MILAGRO 001Sobran ejemplos de este código de conducta fundamentalista. Jesús Fiochi, empresario cántabro, hizo fortuna con el negocio de la construcción. La época dorada de la promoción inmobiliaria fue la panacea para Fiochi, y el dinero corría raudo hacia sus cuentas bancarias. El empresario, además, mantenía una excelente relación con don Emilio, era de los pocos privilegiados de este mundo al que se le permitía el tuteo con el prócer del Santander. La fortuna acumulada por Fiochi le hizo pensar en convertirse en banquero, por lo que propuso al cántabro la creación de un banco en Burgos, idea que no cayó en saco roto, por lo que Botín decidió apoyarle. Las cosas no discurrieron como estaban previstas: el banco burgalés empezó a tambalearse, y a las primeras de cambio don Emilio abandonó a su amigo y levanto el vuelo. Hasta entonces todo habían sido parabienes y la financiación del Santander cubría lo necesario. Pero cuando las cosas se torcieron, el novato en las lides bancarias tuvo que apechugar, él solito, con el descalabro. Fiochi acabó arruinado cuando el Santander le fue ejecutando, una a una todas sus propiedades. Botín no se reparó en gastos, ni siquiera ante la vivienda de la familia Fiochi; la humillación fue tal que acabó con la vida de Fiochi seis meses después del embargo. Don Emilio tenía por costumbre, quizá una caritativa obsesión, consistente en recordarle a cualquiera que estuviese a su lado que bajara las escaleras sin llevar las manos en los bolsillos, porque, según él, en caso de caída podía defenderse mejor si llevaba las manos sueltas. Se ve que en el caso de su amigo Fiochi, se le olvidó recomendar tan prudente cautela, porque el infortunado cayó rodando por las escaleras sin poner las manos a tiempo.
Pero la lista de los accidentados es mucho más amplia. Otro de los amigos más dilectos de don Emilio era Antonio Escalante Huidobro terrateniente extremeño, que a raíz de algunos avatares adversos en sus negocios agrícolas y ganaderos, suscribió determinados créditos con el Banco Santander. En cierta ocasión don Emilio le propuso que se presentara a las primeras elecciones generales, con el fin de añadir un político más a su cuadra. A Escalante no le seducía la idea, habida cuenta de la marcha irregular de sus actividades, pero el patriarca le convenció “de eso no te preocupes, Antonio, lo importante es que no salgan elegidos los rojos”, le espetó. Con dicha doctrina, a Escalante le pareció que el tiempo que iba a hurtar a sus asuntos estaría sobradamente compensado con las ayudas que sin duda iba a recibir del banquero. El terrateniente no tuvo suerte en su empeño contra las “hordas izquierdistas”. Se presentó, claro esta, por las listas de Alianza Popular en las legislativas de 1979, y quinientos votos escasos le separaron del ansiado escaño. Don Emilio, tras la derrota sufrida por su mandado amigo, sencillamente lo borro del mapa, y el Santander ejecutó de inmediato todos los créditos dejándolo en la miseria. Vamos a dejar aquí las vicisitudes del círculo de amistades del prócer de los Botín y las conectaremos con las de su sucesor para poder asegurar que de tal palo tal astilla. Esto será en la próxima entrega.
La política, o el arte de apostar a caballo ganador y colocado
alianza-popular-1982%20generales[1]Hay que reconocer el ojo clínico del patriarca de los Botín, no tan sólo fue el primero en vislumbrar el negocio bancario al otra lado del Atlántico sino otro más próximo y lucrativo: el pupilaje de sus políticos, una casa de huéspedes con hospitalidad asegurada mientras rinda, con la salvedad que si el pupilo no aporta negocio se le deja caer. En política, la familia Botín siempre ha mantenido un pragmatismo maquiavélico, defendido de puertas para a fuera que “hay que estar de parte del gobierno de turno”, por lo que don Emilio no dudó en respaldar la intervención de Rumasa dispuesta por Felipe González en 1983; claro que sus barbas, en aquel momento, estaban en remojo.  Pero lo cierto es las inclinaciones derechistas de la familia han sido evidentes, a pesar de algunos guiños estratégicos y transitorios que no han tenido mas remedio que hacer a los socialistas. Hasta el punto de que don Emilio Botín se rodeo de patricios del régimen franquista, como Manuel Fraga Iribarne y Juan Hormaechea, que en los inicios de la democracia llegaron a pasar por su nómina. Se cuenta que; cuando el Rey optó por nombrar presidente del Gobierno a Adolfo Suárez, en 1976, provocó, como se sabe, un profundo disgusto en Manuel Fraga, aspirante también al sillón. Don Emilio recibió una llamada personal del monarca porque tenia interés en que siguiera ocupando el cargo de ministro de la Gobernación con categoría de vice-presidente del nuevo Gobierno, añadiendo algo que parece increíble: parece que el monarca había llamado personalmente a Fraga a su casa y su mujer le dijo que permanecía encerrado en habitación y no se le podía molestar por nada ni por nadie, incluido el Rey. Botín no dudó en decir a Carmen, la mujer del irascible político, que “estaba dispuesto a ponerse de rodillas delante de su marido para que aceptase el encargo de la Zarzuela”. Así lo hizo tres veces consecutivas; el banquero intento infructuosamente que el gallego, ciego de rabia, se pusiese al Felipe+González+1[1]teléfono para tratar de una cuestión delicada que implicaba al mismísimo monarca. Botín, no quería perder la oportunidad que un patrocinado suyo, por decirlo suavemente, renunciara por un cabreo a un puesto en el Gobierno. No obstante lo cual, a pesar del feo gesto del entonces líder de la derecha española, los Botín tiraron la casa por la ventana (a costa del banco, naturalmente), cuando las primeras elecciones democráticas, apostando fuerte por Alianza Popular, aunque el empeño por aupar la derecha al poder resultó tan baldío como aquellas insistentes llamadas para que Fraga formara parte del Gobierno Suárez. Desde entonces, ese pupilaje de políticos ha pasado de la modesta casa de huéspedes al hotel de cinco estrellas dado el rendimiento obtenido, por unos y otros –patrón y huéspedes-) bajo el pragmatismo maquiavélico impulsado por don Emilio, de que “hay que estar de parte del gobierno de turno”, se puede traducir que hay que apostar a caballo ganador y colocado y así nunca se pierde: gobierno y oposición pertenecen a la misma cuadra.      
EI diario de la discordia
INFOR 001El ojo clínico de Botín padre una vez que empezó a fichar “caballos para su cuadra” emprendió, primero, la compra de periodistas para después pasar a la compra de medios de comunicación. El prócer, más listo que el hambre, participaba rodeado siempre de otros interesados para no despuntar, pero seguro de la fuerza que iba a tomar la comunicación en España a través de la prensa y la televisión. Él iba a estar ahí, de una forma o de otra, y como anécdota este episodio del que curiosamente nunca se han ocupado los medios de comunicación, es el  relativo a la incursión de don Emilio en el negocio periodístico que emprendió a través de sus amigos Víctor y Jesús de la Serna. Se trataba de resucitar el viejo vespertino madrileño Informaciones,lo que se logró por la suma de esfuerzos de Emilio Botín padre, el marqués de Deleitosa, el conde de Cadaguay los March. El director, Jesús de la Serna, reunió en torno a él a un plantel de periodistas que luego, curiosamente, formaron la base de El País.Pero a poco de comenzar el rotativo su andadura, los banqueros -siempre proclives a la división entre si- nunca estaban de acuerdo con cualquier cosa que se publicaba, incluso la más nimia; ya por supuesto, se sucedieron también las presiones políticas, hasta llegar a los extremos mas ridículos que cabe imaginar: por ejemplo Gonzalo Fernández de la Mora, entonces ministro de Obras Públicas, llegó a quejarse ante el editor, de que en la primera página del periódico se había dado cuenta de un descarrilamiento en el que murieron seis personas; para el ministro de Obras Públicas resultaba escandalosa la publicación de semejante noticia, que mejor podía haber quedado reducida, a fin de no limitar el derecho de información, a un par de líneas en cualquier hoja par del interior del número. Lo cierto es que ante las incertidumbres del cambio político, las desavenencias entre los socios capitalistas procedentes del sector bancario subieron de tono y provocaron la caída del periódico de la peor manera posible, sin preocuparse en lo más mínimo del destino de la plantilla: así, a Víctor de la Serna, el gran amigo de los Botín, ni siquiera le concedieron la menor indemnización por el despido.
EI otoño del patriarca
padre-e-hijo-botin-008D5DMGP1_1[1]En noviembre de 1986, después de 36 años en la presidencia del banco, don Emilio cedió el mando del buque insignia, el Santander, a su primogénito. Otro banco, el Bankinter, del que también era presidente desde su constitución hacia 21 años, se lo encomendó a su otro hijo Jaime. El patriarca todavía permaneció como administrador, pese a sus 83 años, de suerte que el cambio generacional quedaba tutelado bajo su sombra protectora, una sombra un tanto incómoda para sus vástagos, todo hay que decirlo. Durante los 56 años que don Emilio permaneció en el banco, su actividad fue frenética, pero al transferir el cetro a sus hijos, el patriarca se dedicó a la vida contemplativa. Mantuvo la cabeza despierta, aunque se acentuó su padecimiento tradicional, la aguda flebitis. En esta etapa de su vida, ya con el deber cumplido, entró en fase ascética, solo interrumpida de vez en cuanto para recibir al joven financiero Javier de la Rosa, con el que siempre mantuvo una relación cordial, antes de su caída en desgracia. La verdad es que los vínculos postreros con el empresario catalán no le fueron demasiado bien al cantabro, como ocurrió en el asunto de la azucarera Ebro; se trataba de dar un golpe de mano en esta sociedad para hacer en tan formidable y valiosa empresa lo que les viniera en gana en detrimento de los socios minoritarios, a los que intentaban acorralar mediante el ejercicio de una opa limitada al 51% del capital social.
Botín y de la Rosa, asesorados por Ramón Hermosilla, se las prometían muy felices, pero llevaron a efecto la operación tan rematadamente mal que Francisco Lozano y Santiago Foncillas, -presidente y vicepresidente de la sociedad, respectivamente, asistidos en derecho por Rafael Pérez Escolar, pusieron a los opantes en un serio compromiso, hasta el punto de que tuvieron que tirar la toalla y respetar íntegramente el derecho de todos los accionistas de la azucarera sin limitación alguna. E incluso, gracias a la generosidad de los opados, Botín y de la Rosa no tuvieron que sentarse en el banquillo. De esta forma, con más pena que gloria; acabaron los devaneos financieros de don Emilio. En sus últimos años, Botín Sanz de Sautuola oía misa a diario con devoción, lo que solía hacer en la iglesia de los Redentoristas. El trayecto que separa el templo de El Promontorio lo hacia a pie. Quienes se percataban de su presencia veían a un venerable anciano, rosario en mano y apoyado en el sempiterno bastón, con el mismo porte elegante de toda su vida. Quien sabe si buscaba la admonición del único que podía perdonarlo.


martes, 4 de diciembre de 2012

El aprendizaje mutuo entre distintas provincias es una de las causas del milagro económico chino





El vigente estado autonómico ha producido más victimismos y resentimientos territoriales que nunca. Una propuesta federalista realmente innovadora debería fomentar la experimentación de políticas públicas




Existe una poción política mágica? Si echamos un vistazo a las políticas de los países con mejores perspectivas de crecimiento durante los próximos años, vemos que, como mínimo, no parece existir una receta universal. Se puede ser muy competitivo con poquísimas políticas sociales (Singapur) o con muchísimas (países nórdicos); regulando con mano férrea (China) o bien dejando libertad a la mano invisible del mercado (Estados Unidos). Diferentes contextos sociales, económicos, culturales o geográficos parecen exigir políticas distintas.
¿Y cuáles son las políticas que funcionan mejor en un país con las características de España? Algunas están más o menos claras, pero otras no. Por ejemplo, en política fiscal, cabe pensar que reducir el IVA al sector turístico haría aumentar la actividad económica a corto plazo y, a medio, la recaudación fiscal. Pero también es lógico pensar que si, por el contrario, decidimos subir los impuestos al turismo, aumentaríamos la recaudación y, de paso, fomentaríamos que la estructura económica española se desplace del sector turístico hacia la producción de bienes y servicios exportables con alto valor añadido. Dudas parecidas surgen en cualquier política importante. ¿Hasta dónde flexibilizar un mercado laboral como el español? ¿Cuándo recortar o ampliar las políticas de bienestar que tenemos?
Para resolver estos dilemas lo ideal sería recrear con políticas el famoso anuncio del lavavajillas: que una comunidad política con un problema concreto (Villarriba) adopte una política A y otra comunidad lo más parecida posible (Villabajo) adopte una política B. Así sabremos qué política puede funcionar mejor en un determinado contexto. Esta vía experimental es la que, de forma implícita o explícita, están siguiendo algunas de las regiones económicamente más dinámicas del mundo.
Un primer ejemplo es China. A diferencia de otros líderes con una visión clara sobre qué políticas adoptar, Deng Xiaoping inició en 1979 un proceso de desarrollo basado en la experimentación. Probemos varios sistemas económicos (unos más “comunistas” y otros más “capitalistas”) en distintas provincias o unidades territoriales y, cuando veamos los resultados, copiemos el mejor.

El aprendizaje mutuo entre distintas provincias es una de las causas del milagro económico chino
Pronto los experimentos dejaron de ser dirigidos desde el centro y pasaron a ser el resultado de la competicion entre autoridades provinciales y otras entidades sub-nacionales. Al contrario de lo que ocurre en otros regímenes autoritarios, las autoridades centrales chinas fueron delegando políticas fiscales y económicas relevantes a autoridades regionales y locales. China avanzó así hacia lo que economistas como Barry Weingast llaman market-preserving federalism(o “federalismo de mercado”): unidades territoriales que, dentro de un mismo país, compiten por atraer inversiones y capital humano. Por ejemplo, una provincia impone ineficientes controles de precios a productos básicos y la vecina no. Al cabo de un tiempo, el contraste entre la una y la otra resulta tan obvio que la primera los elimina. La espiral de aprendizaje mutuo entre distintas unidades dentro de China que este “federalismo de mercado” ha generado es posiblemente una de las causas del milagro económico chino.
Es importante subrayar que este benchmarking —o comparación— de políticas funciona entre comunidades relativamente similares. Transplantar políticas que funcionan en un país a otro muy diferente es un ejercicio arriesgado. Un ejemplo sería el sonoro fracaso en muchas repúblicas exsoviéticas de instituciones copiadas de democracias capitalistas avanzadas.
Otro caso exitoso serían las pequeñas economías del norte de Europa, donde funcionan, de facto, los mecanismos propios de un federalismo de mercado. Por ejemplo, los daneses están constantemente atentos a lo que otros vecinos escandinavos hacen y viceversa. Esta permanente competencia es posible gracias a la alta movilidad de personas y empresas en países con estructuras productivas similares. Si tu vecino, por ejemplo, hace una política muy atractiva para la investigación y el desarrollo, mejor que la copies pronto antes de perder a todos tus cerebros.
Vayamos a nuestro país. Si pudiéramos tener dos Españas más o menos parecidas, y que una de ellas optara por la política económica A y la otra eligiera la política opuesta B, podríamos generar una espiral de aprendizaje que nos permitiera encontrar las políticas más apropiadas para nosotros. El problema es que no tenemos dos Españas. Pero, un momento ¿No es nuestro problema precisamente que tenemos dos, o 15 o 17 Españas? ¿Por qué no convertir este problema en la solución al anterior? España tiene regiones con una similar estructura socio-económica y cultural que permitiría una experimentación natural del tipo federalismo de mercado. Así, por ejemplo, si Valencia adoptara una verdaderamente independiente política fiscal (o laboral) A y, a la vez, Cataluña o Baleares adoptaran la política B, podríamos ver qué opción funciona mejor en nuestro contexto. Lo mismo con cualquier otra política: cuanta mayor libertad tengan los gobiernos autonómicos para acertar (y equivocarse), más aprenderemos todos.

En un mundo globalizado, las unidades políticas pequeñas y autónomas tienen muchas ventajas
En la actualidad, el gobierno central, que monopoliza las políticas económicas y fiscales relevantes, se ve obligado a proponer complejísimos modelos de cuantificación de los servicios que prestan las comunidades autónomas. La financiación autonómica se determina de acuerdo a unas fórmulas con tantas variables que resulta imposible saber si obedecen a criterios técnicos o a las pataletas de los políticos de turno. Mientras, los gobiernos autonómicos deben dedicar muchos de sus esfuerzos, como apunta el economista Guillem López Casasnovas, a pedir comida cual pollitos, en lugar de a tomar decisiones políticas responsables.
El vigente estado autonómico del café descafeinado para todos —de “cooperación” y solidaridad territorial teledirigida desde el centro— ha producido el efecto contrario al buscado: más victimismos y resentimientos territoriales que nunca. Una propuesta federalista realmente innovadora debería fomentar la experimentación de políticas públicas. Es decir, un federalismo que fuera más competitivo que cooperativo. Aunque obviamente pudiera haber espacio para ciertas transferencias interregionales (claras) y donde, además, el estado central se reservara el ejercicio de aquellas competencias para las que existen indiscutibles economías de escala, como defensa.
El federalismo de mercado podría convertirse en un juego de suma positiva en el que todos nos acabaríamos beneficiando. Aunque, en especial, los ciudadanos de las comunidades más desfavorecidas, por paradójico que pueda parecer. Pensemos en otras dos penínsulas. En Escandinavia, Finlandia —uno de los lugares más pobres y violentos de Europa hace poco más de un siglo— se ha convertido en ejemplo de civilización y competitividad económica. En Italia, otra de las regiones europeas históricamente más atrasadas, el Mezzogiorno, vivió lo que, en principio, parece un golpe de suerte: unificarse con sus ricos vecinos del norte. Sin embargo, tras décadas recibiendo transferencias económicas, el sur de Italia sigue sufriendo un notable retraso. Finlandia, por el contrario, no ha recibido transferencias económicas de sus más ricos vecinos, sino algo más valioso: información sobre qué políticas públicas pueden ser más eficientes. E incentivos para mejorar: si no tienes políticas que favorezcan el desarrollo económico y la cohesión social, tu población se va al país vecino.
El objetivo de una reforma federal de España debería ser fomentar Finlandias, no Campanias. Y la inspiración histórica para la reforma no debería venir de los modelos más populares (dependiendo de tus inclinaciones), como la España imperial, la Catalunya de los Segadors o el sacrosanto pacto de la Transición. Sino del modelo histórico quizás más impopular de todos: los reinos de taifas. Efectivamente, en una época en la que se competía con ejércitos, los reinos de taifas fracasaron. Pero, cuando se compite con políticas económicas eficientes en una economía globalizada, unidades políticas pequeñas, autónomas y bien comunicadas presentan grandes ventajas. Así que, ¿por qué no reinventar un reino de taifas?

La hora para esta enmienda a la Constitución es AHORA.




VOTACIÓN DEL PARLAMENTO EUROPEO SOBRE SI SE VUELA EN CLASE TURISTA (mucho mas barato) O BUSSINES.

*Esta es la REALIDAD. Tomad nota.* *Saludos a todos.*

*Golfos...*

*Nos sobran casi todos.*

*La pasta que se ahorraría*

El miércoles 6 del pasado mes de abril, en el Parlamento Europeo se votó una enmienda para restringir los vuelos en primera...*

*NOTA PREVIA.- Un vuelo de Barcelona a Bruselas, en "Bussines Class" de Iberia, ida y vuelta, cuesta unos 1.297 €. Con Vueling, clase turista, unos 150 euros. Con el coste de cada viaje de un eurodiputado en clase bussines, se paga un maestro durante 20 días.
________________________________

BUENO, PUES ASÍ VOTARON LOS EURODIPUTADOS ESPAÑOLES:

-A favor de volar en turista:

Ramón Tremosa i Balcells (CiU)
Rosa Estarás Ferragut (PP)
Oriol Junqueras Vies (ERC)
Raúl Romeva i Rueda (Iniciativa)

-En contra de volar en turista:

Francisco Sosa Wagner (UPD)
Jaime Mayor Oreja (PP)
Alejo Vidal-Quadras (PP)
Luis de Grandes Pascual (PP)
Pilar del Castillo Vera (PP)
Carlos Iturgaiz Angulo (PP)
Teresa Jimenez-Becerril Barrio (PP)
Pablo Arias Echeverria (PP)
Pilar Ayuso (PP)
Agustín Diaz de Mera García (PP)
Santiago Fisas Ayxela (PP)
Carmen Fraga Estévez (PP)
Salvador Garriga Polledo (PP)
Cristina Gutiérrez-Cortines (PP)
Ester Herranz García (PP)
Gabriel Mato Adrover (PP)
Francisco Millán Mon (PP)
Ignacio Salafranca Sánchez-Neyra (PP)
Josefa Andrés Barea (PSOE)
Inés Ayala Sénder (PSOE)
Alejandro Cercas (PSOE)
Ricardo Cortes Lastra (PSOE)
Iratxe García Perez (PSOE)
Eider Gardiazabal Rubial (PSOE)
Enrique Guerrero Salom (PSOE)
Sergio Gutiérrez Prieto (PSOE)
Ivan Irigoyen Pérez (PSOE)
Juan Fernando López Aguilar (PSOE)
Miguel Ángel Martinez (PSOE)
Antonio Masip Hidalgo (PSOE)
Emilio Menéndez del Valle (PSOE)
María Muñíz De Urquiza (PSOE)
Andrés Perelló Rodriguez (PSOE)
Teresa Riera Madurell (PSOE)
Antolín Sánchez Presedo (PSOE)
Luis Yáñez-Barnuevo Garcia (PSOE)
Raimon Obiols (PSOE)

-Abstenciones:

Izaskun Bilbao Barandica (PNV)
María Badia i Cutchet (PSOE)

Los parlamentarios españoles en Europa se niegan a volar en clase turista. La "crisis" solo existe para los de siempre: Hospitales con plantas cerradas, Centros de Asistencia que cerrarán por las noches, sueldos recortados y un largo etc. pero ellos no pueden prescindir ni tan siquiera de una cosa tan prescindible...

Lamentable y vergonzoso, ¿no?.

RECORDAD ÉSTO CUANDO VENGAN LAS ELECCIONES
POR FAVOR LEED HASTA EL FINAL POR SU IMPORTANCIA ESTE MENSAJE DEBE TENER LA MAXIMA DIFUSIÓN Y REPERCUSION EN TODOS LOS MEDIOS DE COMUNICACION

¿Qué recibe un diputado tras resultar elegido?


1. Varios


- Un iPhone 4S.
- Un iPad.
- Un PC en el despacho.
- Módem 3G.
- Voz y datos pagados.
- ADSL en casa pagado.
- Si eres del PP o PSOE, un asistente para cada dos diputados. Si eres de otro partido, uno propio.
- Un despacho propio.
"Estamos pidiendo un sacrificio a todos los ciudadanos..."


2. ¿Y para moverse?

- Si usa su propio coche recibe 0.25€ por km, o sea, 25€ cada 100 km y se te pagan los peajes.
- Si no tienes un coche oficial asignado, 3.000€ anuales para taxis (250€/mes).
- Billetes de primera clase para avión, tren y barco.
"Tendremos el Estado de bienestar que podamos..."


3. ¿Y el sueldo?

- Sueldo base de 3.126,52€ mensuales y dos pagas extra.
- Si formas parte de alguna comisión, recibes entre 775,15€ y 1.590,34€ más al mes.
- Si tienes algún cargo (Portavoz, Secretario, etc), como mínimo recibes 2.318,96€ más al mes.
- Puedes tener trabajos y cargos fuera del congreso sin límite ni perjuicio en el sueldo/ayudas.
- Los sueldos que cobres de tu partido, tampoco afectan en nada.
"Los sacrificios de hoy son la puerta al bienestar del mañana..."


4. ¿Y las ayudas?

- Si eres elegido fuera de Madrid, recibes 1.823,86€ más al mes, para alojamiento y manutención.
- Si fuiste elegido en Madrid, recibes 870,56€ mensuales más para alojamiento y manutención.
- Si viajas dentro de España, 120€ diarios.
- Si viajas fuera de España, 150€ diarios.
"Los españoles pueden estar seguros de que no habrá sacrificio ni esfuerzo que no estemos dispuestos a hacer..."


5. ¿Y los beneficios fiscales?

- Las dietas relacionadas con transporte no tributan, no se declaran a Hacienda vamos.
- Las dietas relacionadas con alojamiento y manunteción no tributan.
- Los sueldos/dietas por tener un cargo en el Congreso, no tributan.
- Si dejas de ser diputado, percibes una paga mensual de 2.813,87€ hasta un máximo de dos años. No importa si tienes un sueldo privado.
"La salida de la crisis, se hará con el esfuerzo de todos..."



6. ¿Y si se disuelven las cortes porque va a haber elecciones?

- Derecho a una indemnización consistente en el sueldo de los días transcurridos hasta que se for ma el nuevo Congreso (el sueldo de dos meses aproximadamente), vuelvas al Congreso o no.
- El Congreso te paga las cuotas de la Seguridad Social , Derecho pasivo y otras cosas durante ese tiempo.
- El Congreso mantendrá tu póliza de accidentes durante ese tiempo.
- El Congreso sigue pagando el ADSL, voz y datos durante ese tiempo.
- La mudanza de tu despacho corre a cargo del Congreso.
"Todos tendremos que hacer sacrificios..."


7. ¿Y la jubilación?

Si tienes 55 años y...
- Has sido diputado once años: 100% de la pensión máxima (2.466,20€).
- Has sido diputado entre nueve y once años: 90% de la pensión máxima .
- Has sido diputado entre siete y nueve años: 80% de la pensión máxima .
- Por el 10 % del salario base, derecho a pensión privada a cargo del BBVA.

Como véis, son unas condiciones lamentables. Por eso los políticos son los más adecuados a la hora de hablar de recortes y sacrificios. Ellos ya se están apretando el cinturón y pasándolo muy mal... ASI ENTENDEREMOS POR QUÉ SE CLAVAN NAVAJAS Y CUCHILLOS ENTRE ELLOS POR ESTAR AHÍ……. EN LA LISTA DE LOS ELEGIDOS



VAMOS A INTENTARLO :



Se trata de que cada destinatario reenvíe este e- ma il a su lista de contactos (con CCO), y a la vez, pedir a cada uno de ellos que hagan lo mismo.

En tres días, la mayoría de las personas de este país tendrán este mensaje.

Ley de Reforma del Congreso de 2011 (enmienda de la Constitución de España):

1. El diputado será asalariado solamente durante su mandato. Y no tendrá jubilación proveniente solamente por el mandato.

2. El diputado contribuirá a la Seguridad Social como todo el mundo y pasará al régimen vigente de la Seguridad Social inmediatamente. El diputado participará de los beneficios dentro del régimen de la Seguridad Social exactamente como todos los demás ciudadanos. El fondo de jubilación no puede ser usado para ninguna otra finalidad.

3. El diputado debe pagar su plan de jubilación, como todos los españoles.

4. El diputado dejará de votar su propio aumento de salario.

5. El diputado dejará su seguro actual de salud y participará del mismo sistema de salud que los demás ciudadanos españoles

6 El diputado debe igualmente cumplir las mismas leyes que el resto de los españoles.

7. Servir en el Congreso es un honor, no una carrera. Los diputados deben cumplir sus mandatos (no más de 2 legislaturas), después, irse a casa y buscar empleo.

Si cada persona pasa este mensaje a un mínimo de veinte personas, en tres días la mayoría de los españoles recibirán este mensaje.


La hora para esta enmienda a la Constitución es AHORA.
ES ASÍ COMO PUEDES ARREGLAR EL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS.